Cucaracha. Cuca y racha

Acababan de terminar las clases en la escuela de insectos. La maestra Doña Mariposa recogía sus cosas cuando, de repente, oyó un gran alboroto al otro lado de la puerta. Doña mariposa se asomó para ver qué pasaba: en medio del pasillo, dos pequeños bichitos discutían haciendo mucho ruido. Eran Cuca y Racha.

- Pues yo soy mejor que tú - decía Cuca.

- Que no, que soy yo, le contestaba Racha. Y así una y otra vez....

- Pero bueno, ¿Qué ocurre aquí? – les preguntó Doña mariposa.

- Es que Racha dice que no sé leer – dijo Cuca.

Y entonces contestó Racha:

- Lo que pasa es que Cuca dice que yo no sé dibujar...

Doña mariposa, amablemente les contestó:

- ¿Qué os parece si hacemos una cosa? Mirad, he escrito una historia sobre un bosque con muchos árboles y un río lleno de peces de colores. Y en los árboles, hay nidos de unos pajaritos que cantan así: cu-cu, cu-cu, y por eso se llaman cucos. Cuca, ¿porqué no dibujas ese bosque con sus árboles, sus animales y ese río con peces de colores? Y tu Racha, ¿nos lees el cuento con esa voz tan bonita que tienes?

- Vale, vale, yo pinto y tú lees - dijo Cuca, a lo que Racha contestó:

- Sí, sí, me gusta la idea, ¡vale¡

Y entonces, Cuca dibujó un bosque precioso con animales, árboles y un río lleno de peces de colores, y Racha leyó una historia muy bonita con esa voz tan fantástica que tenía. Al final del cuento, todos los insectos de la clase aplaudieron porque habían disfrutado mucho con Cuca y Racha. Al terminar el cuento, doña mariposa se acercó y les dijo: yo creo que las dos tenéis cosas muy buenas. Cuca, tu dibujas muy bien y tú, Racha, nos entretienes con tu voz leyéndonos cuentos tan bonitos. Y entonces dijo Cuca:

- ¿Sabes Racha? Mañana te enseñaré a dibujar.

Y entonces Racha contestó:

- Pues yo te enseñaré a leer, Cuca.

Y desde entonces, todos los cuentos del mundo de los insectos (las moscas, las mariposas, las libélulas y los escarabajos), los escribieron las dos amigas juntas: Cucaracha.

María Barahona